Si eres de esas personas a las que les gusta explorar sin limitaciones, a excepción de las que la propia naturaleza te ponga, la opción de la tienda de techo es idónea y apropiada. Por lo que hemos escrito en los dos puntos anteriores y porque te permite descubrir parajes, rincones de una forma mucho más próxima, de una manera más sostenible, más consciente del lugar en el que vivimos.
Y si nos ponemos prácticos, con esta modalidad de viajes el equipaje puede ser el que tú quieras que sea, mucho o poco. No tienes que facturar, ni tienes que cargar con los bultos de aquí para allí. Lo llevas siempre contigo en el maletero del coche. En este caso, aconsejamos viajar con mochila que se adaptará mejor que una maleta dura rígida.
Viajar con tienda de techo te hace sentir libre, feliz por lo que ahorras, y radiante porque una parte de tu hogar también te lo llevas de vacaciones.
4. Naturaleza
Aquí nos podemos poner muy filosóficos e intentar explicar qué es la vida. Invariablemente nos tocaría hablar de nuestra relación con el entorno, de conectar, como especie humana, con nuestra herencia.
Si bien, dejaremos la metafísica que nos despierta la observación de la naturaleza para decirte que, despertarte en medio de una cordillera, con un lago al lado, con el rumor de una cascada cercana, en la que los picos más elevados siguen nevados en verano... que decides alargar el momento de ponerte a preparar el desayuno porque estás viendo salir el sol desde la colina elevada de una cala recóndita del Mediterráneo... es un placer tan intenso que te vestirías con pieles, comerías carne casi cruda, adorarías árboles milenarios y ofrecerías sacrificios a montañas mágicas el resto de tu vida.
Y ahora, con los pies en el suelo, decirte que, realmente, las bondades de despertar en medio de la naturaleza son muchas, y es una de las ventajas que te ofrece el viajar con una tienda de techo. De todas formas, te sugerimos que te informes bien de las restricciones que hay para acampar en los sitios que quieres ver. Porque es verdad que en muchos casos acamparemos y dormiremos en lugares de fantasía que los hoteles no pueden ofrecernos, pero también lo es que, por ejemplo, un parque natural tiene lógicas prohibiciones para los campistas de cara a preservar la flora y la fauna de esa geografía.
Por otro lado, el poder desplazarte con el coche y acampar en el sitio que quieres visitar, o cerca, te permite ganar tiempo y evitar masificaciones. Si la zona que quieres ver es un área muy visitada, el hecho de estar allí la noche anterior a la visita hará que a la mañana siguiente seas de las primeras personas en verla, y te ahorras las aglomeraciones que se crean cuando empiezan a llegar visitantes de otros puntos, los cuales han tenido que recorrer más distancia.
Viajar con tienda de techo te hace sentir libre, feliz por lo que ahorras, radiante porque una parte de tu hogar también te lo llevas de vacaciones, y te hace vivir con pasión la naturaleza.
Y estos han sido, desde una visión general, nuestros motivos por los que viajar con una tienda de techo es una ventaja. Y más ahora en un contexto en el que, por razones sanitarias, se tiende a buscar un turismo de proximidad en el que, al estar más controlada la interacción con otras personas, se reduce el riesgo de contagio.